Se trata de empresas que han desarrollado innovación tecnológica para el diagnóstico oportuno de retinopatía diabética, software para manejo eficiente de estudios clínicos y agendas, otra especializada en el diseño e implementación de soluciones para parto vertical; participan también compañías que han desarrollado productos para mejorar la salud bucal en los tratamientos de quimioterapia y radioterapia.
Participan también compañías de recubrimientos de cobre antimicrobiano para las superficies hospitalarias, de sistemas de gestión y control de alimentos para pacientes lactantes, así como una fábrica de ropa médica descartable en base a polietileno y una desarrolladora de soluciones médicas en formatos móviles para llevar atención de salud a cualquier lugar del país.
Durante la mañana del primer día de actividades, el pasado martes 29, la delegación chilena participó en el seminario “Chile – Colombia, Oportunidades de Colaboración y Alianzas Estratégicas” en donde se reunieron con autoridades del Ministerio de Salud y Protección Social, así como como del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima). En este espacio se pudo conocer el sistema de salud colombiano para ver las opciones de trabajo colaborativo con el sector público.
En las jornadas siguientes, los empresarios chilenos mantienen reuniones con los principales centros de salud privados de Bogotá, tales como Clínica de Marly, Fundación Cardioinfantil, Clínica Palermo, Hospital San Ignacio y la Clínica de la Mujer, entre otras.
Hugo Corales, Director de ProChile en Colombia, afirmó que “Este encuentro es una oportunidad valiosa para concretar alianzas de beneficio mutuo. Varias de las empresas participantes son startups chilenas de la salud, con un componente innovador, social y tecnológico, reconocido internacionalmente por entidades como el BID, lo que puede ser un aporte valioso para la atención de salud en Colombia. Creemos que este sector cuenta con importantes oportunidades en este mercado”.
Además, destacó el estrecho vínculo entre ambos países, que en términos comerciales se traduce en un acuerdo de libre comercio y su convergencia en la Alianza del Pacífico; la iniciativa de integración regional que apunta a la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas.
Fuente: ProChile
