Durante la jornada anual que reunió a los profesionales más relevantes del sector salud, como Directores, CIOs, CMOs y COOs de Hospitales públicos y Servicios de Salud de todo el país, Clínicas privadas, Seguros de Salud, Farma y Empresas Tecnológicas, se presentaron grandes avances digitales que permiten mejorar los procesos, optimizar la atención clínica y brindar un servicio de mayor calidad al paciente.
Por Rocío Maure
La edición anual del Executive Summit se reveló como una cita esencial a nivel nacional para debatir y analizar los últimos avances en las diversas áreas en las que la tecnología está impactando en el sistema de salud chileno. Hoy más que nunca, estos espacios son necesarios para promover el encuentro entre los profesionales de la salud y los expertos en tecnologías.
Como prueba tangible de los beneficios de la digitalización en salud, varios referentes del área de TIC presentaron soluciones concretas que ya se están implementando en el sector y que, en muchos casos, cuentan con la colaboración de equipos clínicos. “Ustedes están haciendo salud, nosotros solo ayudamos con herramientas”, sintetizó el Dr. Alfredo Almerares, referente de Intersystems.
“Hoy en día, ninguna organización tiene un único sistema, sino que coexisten varios sistemas que se dedican a problemas más específicos”, resumió Martín Spangenberg, Product Manager de K2BHealth. El referente de la empresa uruguaya tomó como ejemplo el proyecto país que desarrollaron en su lugar de origen y explicó que la necesidad de interoperar nace por la evolución del ecosistema de soluciones digitales para la salud, ya que primero aparecieron los sistemas administrativos, luego los sistemas clínicos y ahora sistemas cada vez más especializados. Esta empresa facilita el intercambio de información entre sistemas y propone aplicar el mismo esquema que se aplica al país a la organización en sí, es decir, generar una plataforma de interoperabilidad para que las comunicaciones no sean entre sistemas, sino que haya un nexo que las una. En Uruguay comprobaron lo esencial que fue la interoperabilidad a nivel nacional durante la pandemia, para tener información en tiempo real y asegurar la trazabilidad del contacto entre pacientes infectados, la disponibilidad de camas y el proceso de vacunación.
Al desafío del intercambio de la información se le suma la disponibilidad de tiempo de los profesionales de la salud. Luciano Tourn, Co-fundador y CEO de Wúru, presentó su solución que está enfocada en pabellones quirúrgicos y abarca el proceso desde que se define la cirugía hasta que se completa. “Cuando se programa una cirugía, el cirujano o un asistente debe intercambiar más de 20 mensajes para sincronizar la intervención con el equipo de TI (predecir tiempo quirúrgico, elegir pabellón, asegurar recursos, entre otros)”, ilustró y relató que encontraron más resistencia del equipo de programación que del equipo clínico. “Mi recomendación es no pensar en genéricos, es fundamental analizar el flujo de trabajo de profesionales concretos para comprender en qué consiste. Así, el desarrollo pierde la abstracción y resuelve problemas reales”, expesó Tourn.
La nube es otro aspecto fundamental para pensar en la digitalización y la interoperabilidad. Ignacio Núñez, Encargado comercial de CloudHesive, comentó un caso de éxito desde el sector público donde integraron las soluciones de AWS en la gestión de los clientes para reducir los tiempos asociados para el usuario final. Como posible partner de organizaciones de salud, Núñez remarcó que la empresa se encarga de dar el acompañamiento necesario para que la transición sea fluida y las soluciones se ajusten a las necesidades concretas del lugar. Fabián Luengo, Gerente de Territorio para el sector público de AWS, destacó que la empresa está muy vinculada al mundo público y que ofrecen una modalidad de pago por uso que está disponible en todo el mundo. “Nuestro objetivo es acelerar los resultados del ecosistema de salud a través de la nube, para que se pueda desarrollar una estrategia centrada en los pacientes”, resumió.
“¿Cómo puede ser que las enfermedades crónicas sean la primera de causa de muerte en Chile, si son prevenibles y son tratables de forma oportuna?”, fue una de las preguntas que marcó la presentación de Cecilia Muñoz Varisco, CEO de Happ. Las enfermedades asintomáticas como la hipertensión o la diabetes tienen graves consecuencias a nivel clínico y económico, porque los pacientes no suelen atenderse a menos que tengan un síntoma. La estrategia de la empresa es ofrecer un servicio B2B y relevar condiciones de riesgo mediante screenings en empresas grandes. El programa incluye un acompañamiento digital y consultas por telemedicina, para facilitar la adhesión al tratamiento. “Es un modelo innovador porque involucramos a otros actores, como a las empresas, ya que cuidar la salud de los colaboradores no solo mejora la calidad de vida, sino que también previene el ausentismo, reduce las primas suplementarias y optimiza los recursos de las aseguradoras”, destacó la CEO.
La revolución de la IA
Una gran estrella del encuentro fue, sin dudas, la Inteligencia Artificial (IA). En una demostración interactiva, el Dr. Almerares, Clinical Executive Manager de Intersystems, mostró cómo funciona el registro clínico TrakCare con el asistente de IA, que registró todos los audios de una paciente y el médico. La paciente ya tenía acceso al Portal personal de salud, donde recibe toda la información de la consulta y, como agregado, información sobre el diagnóstico de parte del médico. Gracias al uso de un modelo de datos de lenguaje largos (LLM), la solución genera desde el archivo de audio un SOAP completo, que incluye la información Subjetiva, Objetiva, la Evaluación y el Plan. Dado que se necesita información estructurada para un uso secundario, todo el SOAP queda estructurado y eso se puede pasar directamente a la historia clínica. El sistema incluso permite corroborar con el audio cada uno de los segmentos. “Algo no tiene que ser perfecto para ser útil, tiene que evolucionar para llegar a esa perfección”, destacó el ejecutivo, y remarcó el tiempo que permite ahorrar este sistema.
Por su parte, el Dr. Jorge Pérez, Co-Fundador y Director de IA de Cero.AI, historizó el desarrollo de la IA desde el siglo XX hasta llegar a los modelos actuales y explicó el funcionamiento y entrenamiento de las redes neuronales. Más allá de la disponibilidad tecnológica, el especialista insistió en que el rol de un emprendedor en salud es el de la innovación: enfocarse en los problemas que tenga la clínica o el hospital. “Es importante que trabajemos como ecosistema; la colaboración y el trabajo en ecosistema nos beneficiará a todos”, destacó Luis Felipe Rodríguez Besa, Co- Fundador y CEO de la misma empresa. Con ese espíritu, están trabajando en varios hospitales públicos de las distintas Regiones, de la región metropolitana y en una red grande de prestadores privados. Cero es el único sistema de contacto con pacientes ampliamente integrado a la red de salud pública y privada del país. Sus fundadores destacan que en el sistema público se puede lograr una alta contactibilidad y eficiencia, ya que usan interoperabilidad con los sistemas de agendamiento, hacen un uso eficiente y efectivo del canal de comunicación (especialmente WhatsApp), y está totalmente adaptado al paciente.
Desde ya, la IA también presenta desafíos que aún se deben abordar. El Dr. Fernando Eimbcke Bosch, Médico Informático Clínico del área de Transformación Digital de la Clínica Alemana de Santiago, advirtió que la IA está limitada por los datos con la que se entrenan los modelos y los sesgos a las que está expuesta. En particular, destacó las limitaciones específicas de los LLM en salud: la precisión y confiabilidad, por la tendencia a alucinar; la falta de pericia médica; la finitud de los datos de entrenamiento; la presencia de sesgos que son desconocidos para el usuario, sobre todo de género; y las respuestas impredecibles. Como experiencia concreta, hace dos años comenzó con su equipo el proyecto de Alemana GPT. El objetivo era resolver problemas de la ficha clínica con un modelo de lenguaje. Una de las funciones que más se usan, aún en producción, es resumir un episodio ambulatorio o de hospitalización, pero el clínico no puede conversar con la herramienta, solo pedirle el resumen.
Tal como explicó el referente de la Clínica Alemana, el sector salud debe promover el uso responsable y ético de las herramientas de IA. En particular, los departamentos de informática todavía enfrentan ciertos problemas, como no poder certificar la herramienta, porque son contextos impredecibles y respuestas que aún no existen; y deben manejar grandes volúmenes de texto en poco tiempo.
Gracias al trabajo de muchos equipos, ya se empiezan a vislumbrar algunas soluciones, como la interacción natural y conversacional con RAG (retrieval augmented generation) para devolver información sobre el paciente a partir de información específica, que permita enfocarse en el paciente, pero aún queda mucho camino por recorrer. “Innovar es probar, cambiar y volver a probar; se necesita apoyo político, técnico y económico para innovar; debemos ser prudentes, pero no temer a fracasar”, sintetizó el Dr. Eimbcke Bosch.
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