El nuevo documento desarrollado por la OPS comprende una sinopsis de políticas, conceptos clave, líneas de acción recomendadas e indicadores para el monitoreo de la IA en el sector de la Salud.
Uno de los ocho principios rectores para la transformación digital del sector de la salud promovidos por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) es la inteligencia artificial (IA).
La IA facilita la transformación hacia sistemas de salud más proactivos, predictivos y preventivos. Y, en un contexto en el que existen múltiples experiencias exitosas de su uso vinculadas a la salud poblacional, la investigación, los procesos de cuidado, las soluciones para el paciente y la optimización de operaciones en salud, los países de ingresos bajos y medianos (como los de nuestra región) son los más susceptibles a ganar o perder con la implementación de estrategias basadas en la IA: si logran alinear las estrategias sanitarias, incluyendo procesos de transformación digital e IA, pueden obtener importantes mejoras en los procesos de cuidado de la población.
El desarrollo de estrategias de IA en la salud plantea, en general, grandes desafíos técnicos, éticos,
políticos, regulatorios y de recursos humanos. En particular, en la Región de las Américas, la elaboración
de políticas de Estado sostenidas y la creación de ecosistemas de innovación que atraigan inversiones
para el desarrollo de estas tecnologías pueden ser desafíos difíciles de sortear.
Por todo esto, la OPS desarrolló, para su serie Caja de herramientas de transformación digital, un documento específico sobre Inteligencia Artificial.
El documento explora la aplicación de la IA dentro de los sistemas de salud, los obstáculos para su implementación y las recomendaciones para superarlos. Además, propone indicadores que permitan monitorear el progreso en la implementación y algunas recomendaciones generales.
«En el contexto actual, en el que los gobiernos suelen priorizar otras inversiones, es probable que se amplíen las inequidades en salud existentes en sus poblaciones. Por ello, la creación de capacidad en los órdenes técnicos, políticos, regulatorios y de recursos humanos es central para que los países alcancen una madurez en el uso de IA«, indica la introducción del nuevo recurso.
Fuentes:
https://iris.paho.org/handle/10665.2/57128
