El secretario de la mencionada ONG, Gil Castelo Branco, declaró que la salud se convirtió en una de las áreas que fueron más criticadas durante el gobierno del anterior presidente Luiz Inácio Lula da Silva. En 2003, primer año de su mandato, el presupuesto destinado a Salud fue de R$ 44,6 billones y al final del gobierno alcanzó los R$ 67,5 billones.

Gil Castelo Branco declaró que de los R$ 77 billones, unos 68 billones se destinaron a aumentar los recursos del Sistema único de Saúde (SUS), que distribuye los presupuestos a los estados, municipios además del distrito federal. Así, el ministerio de Salud brasileño tiene el segundo mayor presupuesto de los ministerios del país, después de Prevención Social que quedó con R$291 billones.

 

 

Según datos del Ministerio de Salud hace diez años la inversión pública federal por habitante era de aproximadamente R$ 200 al año. En 2006  la cifra alcanzó casi R$ 220 y se calcula que, si al final de este año, los  R$ 77 billones previstos fuesen efectivamente utilizados, la media de gastos de salud por habitante llegaría al record de R$ 398 al año.