Por Rocío Mellas
Hay un país, en el extremo sudoeste de América, que pretende hacer de la salud conectada un concepto-nación. Por una onomatopeya mapuche del canto del trile, por la palabra frío en quechua o quizás en honor a un cacique picunche ese país se llama Chile. Tiene uno de los PBI per cápita más altos de la región y en materia de eHealth persigue un objetivo concreto: que sus hospitales públicos alcancen estándares informáticos internacionales.
De hecho, con el proyecto SIDRA 2.0 como estandarte, el Ministerio de Salud (MINSAL) está enfocado en desarrollar una historia clínica electrónica (HCE) longitudinal para todos los habitantes del país y potenciar, así, el uso secundario de los datos sanitarios.
Rodrigo Castro Apablaza, jefe del Departamento de Gestión Sectorial de TIC del Ministerio de Salud de Chile, es experto en mHealth, telemedicina y economía de la salud. Mientras prepara su disertación en el panel “Avances y proyecciones de Salud Conectada” de HIMSS Chile 2015, describe la implementación de la segunda fase del Sistema de Integración de la Red Asistencial (SIDRA) y señala cómo están conformadas las alianzas estratégicas para llevar a cabo las iniciativas nacionales de eSalud.
Uno de los retos nacionales es garantizar la sostenibilidad del sistema de salud, ¿de qué forma se puede repensar la inversión sanitaria?
A través de la innovación, que es fundamental para el desarrollo de la salud. En el paradigma actual la salud no está conectada a la economía y, por ende, mejor salud implica costos crecientes tanto para el Estado como para las personas. Esta situación inhibe, por ejemplo, el control de costos. Por eso, para lograr mayores niveles de salud es necesario cambiar el paradigma.
La innovación será el motor de crecimiento para el desarrollo económico y, de esta forma, permitirá introducir eficiencia y sostenibilidad al sistema de salud.
A través de distintas estrategias el MINSAL ha izado la bandera de la salud conectada, ¿qué acciones se implementarán en sintonía con este concepto?
La idea de salud conectada es una visión que se está construyendo desde sus elementos más básicos. De hecho, algunos servicios de salud han iniciado el proceso. Desde el MINSAL estamos trabajando conjuntamente con distintos actores públicos y privados para que esta visión se materialice en acciones concretas a nivel país:
- Con el Ministerio de Hacienda, por ejemplo, queremos formular un proyecto piloto de salud conectada que, de ser aprobado, podría comenzar a implementarse en el 2016.
- Con la Subsecretaría de Economía y CORFO (Corporación de Fomento de la Producción) estamos colaborando en el programa de desarrollo estratégico “S+D: salud más desarrollo”, que busca potenciar la expansión económica del país a partir de innovaciones TI para Salud.
- Con la Universidad de Chile adjudicamos un concurso de bienes públicos de CORFO para implementar digitalmente un servicio de terminología farmacéutica chilena a partir de vocabularios clínicos de referencia para el sector salud.
- Con HIMSS necesitamos avanzar en la adopción de estándares y certificaciones de sistemas de información de salud.
Ya que menciona la adopción de certificaciones, la ministra de Salud, Carmen Castillo, anunció que quiere que Chile tenga hospitales públicos con estándares informáticos internacionales, ¿cómo colaborará el Departamento de Gestión Sectorial de TIC en este proyecto?
TIC sectorial trabaja estrechamente con otras instituciones de gobierno para crear una institución chilena que acredite estándares informáticos internacionales. El año que viene queremos aplicar las primeras encuestas para hospitales con el fin de conocer los grados de madurez de sus soluciones TI. De hecho, iniciaremos la evaluación de ocho hospitales públicos en el modelo de adopción de registros clínicos electrónicos de HIMSS (EMRAM).
Sin ir más lejos, el programa de la Jornada SIDRA estará enfocado en conocer los procesos de acreditación de soluciones TI en algunos hospitales de Estados Unidos y Europa. A través de la estrategia de salud conectada y del nuevo convenio marco SIDRA II, debiéramos lograr resultados favorables y una hoja de ruta para nuestros establecimientos públicos de salud.
Desde que SIDRA I pasó de ser un proyecto ambicioso a convertirse en un plan nacional pasaron siete años, ¿qué enseñanzas ha dejado?
SIDRA I marcó el inicio de la digitalización de los registros clínicos como estrategia país, pero no consideraba la totalidad de los procesos clínicos, asistenciales y administrativos en los distintos niveles de complejidad del cuidado ni tampoco consideraba estándares internacionales de sistemas de información de salud. Por eso es menester seguir trabajando en SIDRA II, sobre todo para aumentar la tasa de penetración y equilibrar el uso entre la atención primaria de la salud -cerca un 80% informatizado- y la atención hospitalaria.
La primera fase de la iniciativa nacional no estaba inspirada en el modelo de Redes Integradas de Servicios de Salud que ha adoptado la Subsecretaría de Redes Asistenciales para la gestión de la red de salud pública, según la orientación de la OPS/OMS. Incluso el número de proveedores que lograron ingresar al catálogo de Chile Compra no fue el que se esperaría para impulsar competitividad y dinamismo.
La ventaja de Chile es que todos los establecimientos de la red pública están conectados con imágenes, voz y datos; es decir, todos los establecimientos de la atención primaria, secundaria y terciaria están linkeados, sólo falta conectar las postas rurales. Con los esfuerzos que estamos realizando, con todos nuestros aliados estratégicos, esperamos mostrar resultados concretos en términos de salud conectada a partir de 2017.
Más allá de la publicación y del inicio de la ejecución del convenio SIDRA II, ¿cuál es el leit motiv de la jornada ministerial del 30 de noviembre?
Este año la jornada marca una nueva etapa, no sólo por el fortalecimiento de la estrategia digital de salud, sino porque además se discutirá un nuevo modelo de negocio de la estrategia de salud conectada.
El objetivo principal del encuentro¹, que tiene como eje central al proyecto SIDRA, es definir un mapa de ruta para lograr la consolidación de una Historia Clínica Compartida, potenciar el uso secundario de datos sanitarios a nivel nacional e implementar el primer repositorio de datos clínicos con el fin de construir tableros de mando para la gestión y evaluación de políticas públicas. Todo esto bajo el paraguas de una definición de estándares para el sistema de información en salud de los establecimientos de la red asistencial.
También se revisarán aspectos como historia clínica compartida, certificación tecnológica, ciencia de datos, innovación y emprendimientos TI para problemas de salud.
¹ La Jornada SIDRA 2.0 ha sido pensada exclusivamente para los equipos SIDRA del país.Por Rocío Mellas
Há um país, no extremo sudoeste da América, que pretende fazer da saúde conectada um conceito-nação. Por uma onomatopeia mapuche do canto do trile, pela palavra frio em quéchua ou quiçá em honra a um cacique picunche esse país se chama Chile. Tem um dos PBI per capita mais altos da região e em matéria de eHealth persegue um objetivo concreto: que seus hospitais públicos atinjam padrões informáticos internacionais.
De fato, com o projeto SIDRA 2.0 como estandarte, o Ministério de Saúde (MINSAL) está enfocado em desenvolver um prontuário médico eletrônico (PME) longitudinal para todos os habitantes do país e potenciar, assim, o uso secundário dos dados sanitários.
Rodrigo Castro Apablaza, chefe do Departamento de Gestão Setorial de TIC do Ministério de Saúde do Chile, é especialista em mHealth, telemedicina e economia da saúde. Enquanto prepara sua dissertação na palestra “Avanços e projeções de Saúde Conectada” do HIMSS Chile 2015, descreve a implementação da segunda fase do Sistema de Integração da Rede Assistencial (SIDRA) e indica como estão compostas as alianças estratégicas para realizar as iniciativas nacionais de eSaúde.
Um dos desafios nacionais é garantir a sustentabilidade do sistema de saúde. De que forma é possível repensar o investimento sanitário?
Através da inovação, que é fundamental para o desenvolvimento da saúde. No paradigma atual a saúde não está conectada com a economia e, por isso, melhor saúde implica custos crescentes tanto para o Estado como para as pessoas. Esta situação inibe, por exemplo, o controle de custos. Por isso, para lograr maiores níveis de saúde é necessário mudar o paradigma.
A inovação será o motor de crescimento para o desenvolvimento econômico e, desta forma, permitirá introduzir eficiência e sustentabilidade ao sistema de saúde.
Através de diferentes estratégias o MINSAL levantou a bandeira da saúde conectada. Quais ações serão implementadas em sintonia com este conceito?
A ideia de saúde conectada é uma visão que está sendo construída desde seus elementos mais básicos. De fato, alguns serviços de saúde iniciaram o processo. Desde o MINSAL estamos trabalhando em conjunto com diferentes agentes públicos e privados para que esta visão se materialize em ações concretas em nível país:
- Com o Ministério da Fazenda, por exemplo, queremos formular um projeto piloto de saúde conectada que, caso seja aprovado, poderia começar a ser implementado no ano 2016.
- Com a Subsecretaria de Economia e a CORFO (Corporação de Fomento da Produção) estamos colaborando com o programa de desenvolvimento estratégico “S+D: saúde mais desenvolvimento”, que procura potenciar a expansão econômica do país a partir de inovações TI para Saúde.
- Com a Universidade do Chile adjudicamos um concurso de bens públicos da CORFO para implementar digitalmente um serviço de terminologia farmacêutica chilena a partir de vocabulários clínicos de referência para o setor saúde.
- Com a HIMSS precisamos avançar na adoção de padrões e certificações de sistemas de informação de saúde.
Já que menciona a adoção de certificações, a ministra de Saúde, Carmen Castillo, anunciou que quer que o Chile tenha hospitais públicos com padrões informáticos internacionais. Como colaborará o Departamento de Gestão Setorial de TIC neste projeto?
TIC setorial trabalha estreitamente com outras instituições de governo para criar uma instituição chilena que credencie padrões informáticos internacionais. No ano que vem queremos aplicar as primeiras entrevistas para hospitais a fim de conhecer os graus de maturação de suas soluções TI. De fato, iniciaremos a avaliação de oito hospitais públicos no modelo de adoção de registros clínicos eletrônicos da HIMSS (EMRAM).
Sem ir mais longe, o programa da Jornada SIDRA estará enfocado em conhecer os processos de acreditação de soluções TI em alguns hospitais dos Estados Unidos e da Europa. Através da estratégia de saúde conectada e do novo convênio marco SIDRA II, deveríamos lograr resultados favoráveis e um roteiro para nossos estabelecimentos públicos de saúde.
Desde que o SIDRA I passou de ser um projeto ambicioso a converter-se em um plano nacional passaram sete anos, que ensinamentos deixou?
O SIDRA I marcou o início da digitalização dos registros clínicos como estratégia país, mas não considerava a totalidade dos processos clínicos, assistenciais e administrativos nos diferentes níveis de complexidade do cuidado, tampouco considerava padrões internacionais de sistemas de informação de saúde. Por isso é primordial continuar trabalhando no SIDRA II, sobretudo para aumentar a taxa de penetração e equilibrar o uso entre a atenção primária da saúde -cerca de 80% informatizado- e o atendimento hospitalar.
A primeira fase da iniciativa nacional não estava inspirada no modelo de Redes Integradas de Serviços de Saúde adotado pela Subsecretaria de Redes Assistenciais para a gestão da rede de saúde pública, segundo a orientação da OPS/OMS. Inclusive o número de provedores que lograram ingressar ao catálogo do Chile Compra não foi o que se esperaria para impulsionar competitividade e dinamismo.
A vantagem do Chile é que todos os estabelecimentos da rede pública estão conectados com imagens, voz e dados; ou seja, todos os estabelecimentos da atenção primária, secundária e terciária estão linkeados, só falta conectar os postos rurais. Com os esforços que estamos realizando, com todos os nossos aliados estratégicos, esperamos mostrar resultados concretos em termos de saúde conectada a partir de 2017.
Além da publicação e do início da execução do convênio SIDRA II, qual é o leit motiv da jornada ministerial do dia 30 de novembro?
Neste ano a jornada marca uma nova etapa, não só pelo fortalecimento da estratégia digital de saúde, senão porque também será discutido um novo modelo de negócio da estratégia de saúde conectada.
O objetivo principal do encontro¹, que tem como eixo central o projeto SIDRA, é definir um roteiro para lograr a consolidação de um Prontuário Clínico Compartilhado, potenciar o uso secundário de dados sanitários em nível nacional e implementar o primeiro repositório de dados clínicos a fim de construir paineis de comando para a gestão e avaliação de políticas públicas. Tudo isso sob o leque de uma definição de padrões para o sistema de informação em saúde dos estabelecimentos da rede assistencial.
Também revisarão aspectos como prontuário médico compartilhado, certificação tecnológica, ciência de dados, inovação e empreendimentos TI para problemas de saúde.
¹ A Jornada SIDRA 2.0 foi pensada exclusivamente para as equipes SIDRA do país.