More Stamina es una iniciativa de Guido Giunti, un medico, investigador y emprendedor argentino radicado en Finlandia, que convocó a un equipo multidisciplinario de expertos para enfocarse en los desafíos que enfrentan las soluciones destinadas a condiciones crónicas, explorando su valor potencial tanto para pacientes como para proveedores de servicios de salud.
El proyecto, que está financiada por Business Finland – una entidad gubernamental que fomenta la innovación -, busca crear un marco viable para la comercialización de este tipo de soluciones, ya sea como servicios directos para pacientes, trabajando junto a compañías farmacéuticas o con una mezcla de modelos de negocio.
«Dada la creciente digitalización del cuidado de la salud, las herramientas digitales se han convertido en la solución de facto para pacientes con condiciones crónicas. Sin embargo, aún no hay demasiada evidencia sobre el valor que trae al proceso sanitario«, explica Giunti, quien actualmente se desempeña como investigador en innovación de salud digital en la Universidad de Oulu, y agrega que «Estamos explorando cómo pueden sobrevivir las soluciones de salud digital más allá de las «condiciones de laboratorio”. La mayoría de las innovaciones en el campo de la salud digital suelen ser proyectos financiados por subsidios que terminan apenas se les acaba el financiamiento, o son desarrolladas por startups que tienen dificultades para sobrevivir de mes a mes. Nuestro proyecto busca contestar dos preguntas claves: ¿cómo integramos estas soluciones al sistema de salud?” y “¿cómo hacer que estas soluciones sean autosustentables?”
Para empezar, decidieron enfocarse en la Esclerosis Multiple (EM), ya que es uno de los desordenes neurológicos más comunes del mundo en jóvenes adultos, afecta a más de 12 mil finlandeses y a casi 3 millones de personas mundialmente, y lo hace durante su etapa más productiva. La progresión de la enfermedad es variada e impredecible, dejando a los pacientes comúnmente con un creciente número de discapacidades.
«Las personas con EM sufren una gran variedad de síntomas, pero la fatiga resulta el síntoma más común y es, en muchos casos, causal de discapacidades», dice la profesora Minna Isomursu de la Facultad de Información, Tecnología e Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Oulu e integrante del equipo de More Stamina. «Hace tiempo que estamos trabajando en EM, observando y construyendo sobre nuestros hallazgos previos y el hecho de trabajar con un equipo multidisciplinario nos permite atacar el problema desde diversos ángulos», agrega.
Ante la pregunta sobre el funcionamiento de More Stamina, Giunti explica que «es una herramienta de autogestión diseñada para ayudar a gente con EM a administrar su energía. La aplicación utiliza sensores portátiles e información contextual para generar recomendaciones personalizadas para que pacientes con EM puedan aprender a manejar su fatiga, y alcanzar así una mejor calidad de vida. La información anónima que recolecta la aplicación es utilizada para encontrar patrones y características ocultos de la EM y así poder desarrollar nuevas formas de ayudar a los pacientes».
Por su parte, los Elementos de Gamificación son utilizados para fomentar la retención y simplificar conceptos complicados como el entender cuanta “energía” tiene una persona al día. La energía está representada como una barra de progreso que muestra cuantos Créditos de Energía (Stamina Credits) le quedan al usuario. Al comenzar cada día, el usuario es guiado para promover mayor intencionalidad en sus actividades diarias.
«Al ir “gastando” sus créditos, las personas con EM irán solidificando su entendimiento de la relación entre el concepto abstracto de “energía” y su experiencia real al final del día, ayudándolos a reducir esa distancia conceptual», comenta el Dr. Giunti.
Las pruebas clínicas con pacientes reales de More Stamina comenzarán muy pronto en varios países. El Hospital Universitario de Oulu es la sede para las pruebas en Finlandia, mientras que el Hospital Italiano de Buenos Aires será sede en Argentina, la Universidad de Sevilla, la Fundación DINAC y el Hospital Nithas Visa en España, y la Kliniken Valens en Suiza. «Además, estamos trabajando en el desarrollo para la integración a sistemas de salud con la HCE y, más a largo plazo nuestro objetivo es implementar More Stamina como parte del servicio de atención dentro del pathway para pacientes con EM», indica Giunti.
Al consultarle sobre el impacto de la iniciativa en la salud de las personas afectadas por EM, en los médicos tratantes y en la salud digital en general, el experto apunta que, a partir de la visualización del gasto de energía que realiza una persona con EM, More Stamina le sugiere cómo planificar el día o la semana en base a los datos recopilados, mejorando su calidad de vida, mientras que al personal de salud, le permite realizar un monitoreo remoto de las actividades del paciente.
«Creemos que el proyecto proveerá nuevas perspectivas sobre como las infraestructuras de salud pueden modificarse para optimizar la creación de valor, y que este trabajo es de alta importancia científica ya que creará nuevos algoritmos y datos sobre el manejo de fatiga«, concluye.
