La burocracia del papel en el sistema de salud público y privado se terminará con la implementación del programa de historia clínica electrónica, integrado en el acuerdo interinstitucional denominado “Salud.uy”.
Se trata de convertir a soporte digital todos los registros de la atención de pacientes, para mejorar la gestión de esos datos y generar mayor eficiencia en el sistema de salud.
Con ese paso, el expediente en el que se deja constancia de los principales hechos del acto médico y de la enfermedad del paciente, podrá ser analizado por más de un especialista sin demoras de traslados. También comprende seguridad para el usuario en la gestión de su historia clínica, ya que se evita el traslado de papel o pérdidas, entre otros aspectos.
El programa será lanzado en dos semanas por el gobierno, según informó a El Observador el director Ejecutivo de la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información (Agesic), José Clastornik. En estos días previos, habrá reuniones de coordinación entre los técnicos que participan de la iniciativa, con el objetivo de definir cuántos usuarios comenzarán a utilizar la nueva herramienta.
En primera instancia, sólo se digitalizará la historia electrónica de un grupo a determinar de usuarios del sistema público de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE). Además de la Agesic, participan el Ministerio de Salud Pública, el de Economía y Finanzas, y la Presidencia.
“Básicamente, la lógica de esto es tener equidad y calidad del servicio. Cómo puedo hacer para compartir los datos de historias clínicas, para que determinada información, como una placa que se toma en el interior y no se informa, se pueda ver por técnicos que generalmente trabajan a cinco cuadras del Obelisco”, explicó Clastornik.
Por su parte, la presidenta del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS) Elena Clavell, explicó que en esta primera instancia se trabaja en integrar los datos básicos de toda la población que se atiende en instituciones públicas y privadas. Estos son: nombre, cédula de identidad, carné de vacunas, si padece alguna enfermedad y toma determinada medicación así como el carné de salud del niño. La implementación permitirá que todas las instituciones crucen datos en caso de ser necesario, lo que beneficiará al paciente que requiera atenderse en cualquier puerta de emergencia o policlínica de cualquier punto del país.
A su vez, se analiza cuánta información hay digitalizada, ya que varios centros de salud comenzaron este proceso hace dos años. Algunos lo implementaron en áreas de farmacia, laboratorio, puerta de emergencias, o policlínicas. Ahora se unificarán los códigos de ingreso de datos, para que sean compatibles con los sistemas a utilizar en todos los centros.
Clavell afirmó que aún no hay cifras de cuánta información ya está digitalizada ni cuánto se invertirá pero aseguró que este sistema deberá incluir “a los más de tres millones de uruguayos”.
Posteriormente, se avanzará en la elaboración de códigos de medicamentos para realizar recetas electrónicas, lo que “permitirá mayor control en el suministro (de fármacos)”. También se podrá controlar cuando el médico ordena un análisis clínico.
“El usuario tendrá garantizado que estén sus datos disponibles en cualquier lugar del país que consulte. Esto es muy importante principalmente para quienes se desplazan por todo el país, así como para las localidades aisladas del interior”, explicó. También en los casos de accidentes de tránsito o personas que son halladas en la calle sin más datos que su nombre o cédula de identidad. Los médicos podrán acceder a su historia clínica y atender al paciente sin cometer errores.
A corto plazo Clavell considera que este sistema permitirá que en los próximos dos años haya un gran avance.
En octubre de 2012, cuando se anunció el acuerdo, Clastornik consideró un “sueño” poder hablar del proyecto de historia clínica electrónica.
A su juicio, la historia clínica electrónica dará confianza a los usuarios. En ello contribuye también el hecho de que esté en marcha la firma electrónica avanzada; que funcione la seguridad de la información en todos los organismos del Estado; y la privacidad y protección de datos por medio de una ley que lo sustenta. A ello se le agrega el avance de las tecnologías con costos menores y un mejor ancho de banda.
Por su parte, el prosecretario de presidencia, Diego Cánepa, consideró que este sistema es “un gran avance” que permitirá cambiar la escasa “cultura de protocolización” existente en el área de la salud.
Cánepa agregó que el proyecto favorecerá a la calidad asistencial así como apoyará a los médicos y pacientes, ante eventuales juicios de mala praxis y agilizará los tiempos de respuesta a un paciente, ante consultas o situaciones concretas. Si bien el sistema comenzará a implementarse en ASSE, luego se ampliará al sistema mutual.
Fuente: El Observador